miércoles, 31 de octubre de 2012

RESTAURANTE MADRE DE DIOS DE MURCIA


Buenas amigos, hoy después de una temporada sin actividad en mi blog gastronómico por el nacimiento de mi primer retoño, retomo la actividad. Lo cierto es que ha sido una terrible experiencia la que me ha impulsado a escribir esta entrada, lo cual lamento, pero la verdad es que me ha dado el impulso necesario para comenzar de nuevo esta etapa para quemecomohoy.

La terrible experiencia la hemos tenido en un restaurante Murciano llamado MADRE DE DIOS, con una excelente ubicación, la plaza de las flores, lo que le convierte en un sitio muy frecuentado. A los propietarios de este restaurante les quiero dar el pésame, si, digo bien, el pésame, por que para mi han fallecido como establecimiento. Y lo fastidiado es que no ha sido por un problema con lo que cocinan, que por otro lado no tiene ninguna particularidad, sino por algo que forma parte de lo que tiene que tener un local del sector hostelero abierto al público, que es la atención al cliente, y en particular a las mujeres con bebes.

Hoy se ha presentado mi mujer en el restaurante MADRE DE DIOS a eso de las 15 para reservar una mesa de 5 personas para comer sobre las 1530, con el fin de que pudieran organizarse en la cocina y no fuera una sorpresa de última hora la llegada de un grupo. Para hacer la reserva se ha adelantado con nuestro bebe en el carrito y quería esperar al resto de comensales tomando algo y aprovechar esa espera para darle un biberón al pequeño. En el local había dos mesas libres en ese momento y le solicita al camarero sentarse en una de ellas y que, por favor, le trajera una bebida. El que le indicaban a mi mujer como el encargado de madre de dios le dice que allí no puede estar por que molesta el carrito del bebe, mi mujer azorada se traslada a la barra, que también estaba medio vacía, y este sujeto le dice que allí tampoco podía estar poco era lugar de paso de los camareros con la comida, todo esto con mesas libres y suficiente espacio en el local, invitándola a salir del local para darle el biberón en la calle al bebe. Evidentemente nos hemos ido a comer a otro restaurante donde nos han atendido correctamente.

Esta actitud deleznable y sobrada por parte del que parece el encargado del local me ha indignado tanto que tengo que compartirlo con mis amigos para que cuando vayan con sus hijos sepan lo que les puede suceder y para que reflexionen sobre si merece la pena gastarse el dinero en semejante lugar. Me limito a trasladaros lo que nos ha sucedido, vosotros sacáis las conclusiones.

Un fuerte abrazo a todos los que seguíais quemecomohoy y anunciaros que en breve volveré con nuevas recetas y entradas sobre restaurantes, congresos y demás….

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