Para cambiar un poco, hemos pasado el día entre Portugal y Galicia, visitando con más interes la población fronteriza de Tui. Pueblo que destaca, entre otras cosas, por tener la primera catedral gótica de Galicia. Es una catedral diferente, digna de visitar.
A la hora del almuerzo estábamos en Tui y preguntamos por allí que sitio nos recomendaban para tomar algo. Un joven, mas o menos de mi edad, nos comento que el mejor sitio en relación calidad-precio, era el restaurante “O vello cabalo furado”, parece que es un clásico de Tui que estaba regentado por dos hermanos que decidieron separase, uno continuo con el restaurante y el otro abrió “O novo cabalo furado”. Dos restaurantes con el mismo nombre, a menos de 15 metros uno de otro, aunque con cocinas bien distintas.
El viejo, que es donde yo comí, mantiene su aspecto tradicional, con cocina abierta al público, mesa con mantel de papel y donde prima el menú de dos platos, con un precio razonable de 9,5€ que incluye bebida y postre. La cocina es solo buena, con una relación calidad precio adecuada. En cuanto al servicio, he de decir que nos atendió una chica de origen Portugués sencillamente correcta.
El nuevo es un restaurante más de carta, entré para verlo pero no tome nada, aunque tengo que decir que tiene muy buena pinta.
Lo que comimos fue lo siguiente:
el caldo gallego, que esta hecho basicamente
a base de berza gallega o grelos en función
de la temporada y alubias.
Arroz con calamar en su tinta. |
Arroz con calamares en su tinta, a mi no me desagradaron, tampoco el mejor que me he comido en mi vida.
Alguien pidio empanada de bacalao, que estaba solo bien.
Otros tomaron jureles fritos. Estaban frescos aunque la ración de quedaba un poco corta.
Salpicon de bonito. En mi tierra esto era como una ensaladilla pero sin
mahonesa.
Tarta de chocolate con crema. A mi personalmente no me gusto pero el resto de comensales decian que estaba bien.
Tarta de manzana. estaba buena, era casera y recien elaborada.
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